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miércoles, 10 de agosto de 2011

CARTAS A DIOS-PELICULA

Director francés Eric-Emmanuel Schmitt


¿Se puede amar más a la vida cuando nos encontramos en la encrucijada de la muerte? ¡Se puede!


Cuando tenemos "vida" nos sentimos grandes y poderosos, creemos ser los reyes del mundo, creemos tener el derecho de influir sobre los demás, y a la vez tenemos que soportar las influencias de otros, sobre todo cuando nos subestiman, menosprecian y/o nos privan de la autoestima, ven en nosotros el vacío que creen tenemos, en muchas ocasiones son proyecciones de ellos mismos, nos hacen pequeños porque desconocen lo bueno o grande que pueda haber dentro nuestro, porque solo se quedan en la superficie y en las falsas apariencias, se pierden en las "realidades" utópicas e idealizan por puro egocentrismo llevados por el egoísmo a quienes por conveniencia se les lleva la corriente..



Esta película me llenó de reflexiones, me sumergí en el amor a la vida, en la inocencia y fe donde poder aferrarme, en la comprensión más intrínseca de la esperanza, en el dejarme llevar por una corriente de positividad más allá de lo que puedo ver en la vida cotidiana, estar alerta de los falsos valores, de aquellos que se hacen llamar "espirituales" y sus obras brillan por su ausencia; aprendí -más si cabe- tomar conciencia de las coincidencias, de los hilos invisibles que marcan señales tan evidentes que en muchas ocasiones pasan desapercibidas, en el Déjà vu que aparece cuando menos te lo piensas..Aprendí de la magia, aquella maravillosa magia que los niños conocen mucho mejor que los adultos, porque son ellos los que pueden ver y desvelar lo invisible de lo visible, mejor que nadie, ya que para ellos la vida es un misterio viviéndolo en la más pura normalidad, de la bondad de muchos de ellos y de las malas intenciones otras...Los niños son pura esencia, pura magia, pura inocencia cuando son ellos mismos en una transparencia sin tacha. ¡Ojalá nunca tomen ejemplo de muchos adultos! sobre todo de los que hago referencia al principio.




Es una película que estremece el corazón, un niño que enseña amor dentro del dolor y por puro amor, una pizzera realizando la mejor obra de su vida...sin pretenderlo, un médico entregando dosis de confianza y motivaciones, para mi forma de pensar/sentir/ estos protagonistas son el mejor ejemplo de un ser espiritual. Unos padres que huyen y reprimen sus sentimientos por miedo...Y...ya dejo mis reflexiones...para que vosotros podáis encontrar las vuestras propias, en el caso de que os decidáis ver esta película, ya bien en el cine o en casa bien cómodos con la coca cola y palomitas incluido...

¿Le has escrito tu carta a Dios? Seguro la está esperando...

Shana




1 comentario :

  1. Gracias Shana por tu recomendación, la veré con mucho cariño. Este tipo de películas que te hacen concectar con tu propia esencia y aprender un poquito más son las que de verdad vale la pena ver. Así que muchas gracias de corazón!!!

    Mª Ángeles

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